El emprendimiento se ha consolidado como un factor clave para la creación de empleo y la reactivación económica, especialmente en un contexto donde la escasez de oportunidades laborales impulsa a muchas personas a buscar alternativas que les permitan asegurar sus ingresos.
Según datos recientes, el 86.6% de los emprendedores inicia su negocio debido a la necesidad de obtener ingresos ante la falta de empleo. Este fenómeno no sólo refleja una respuesta a la escasez laboral, sino también un cambio en la mentalidad empresarial, donde cada vez más personas ven en el emprendimiento una vía para salir adelante y contribuir a la economía del país.
El Global Entrepreneurship Monitor (GEM) refleja que más del 80% de los emprendedores colombianos comienzan su negocio debido a la falta de empleos formales o a la necesidad de generar ingresos. Este fenómeno es especialmente visible en sectores como el comercio, la manufactura y los servicios de alojamiento y comida, donde las personas han encontrado en estos rubros una forma de subsistir, más que una vocación empresarial o una pasión por la innovación.
La influencer Tatiana Uribe, experta en desarrollo personal y empresarial, explica que el emprendimiento en Colombia ha evolucionado de manera significativa en los últimos años. «Antes, ser emprendedor en Colombia significaba luchar en solitario. Ahora hay una verdadera comunidad que apoya a los emprendedores. Espacios de coworking, incubadoras, redes de apoyo y eventos han transformado el panorama». Esta transformación refleja un cambio en el ecosistema emprendedor, donde las personas ahora no sólo ven en el emprendimiento una vía para salir de la pobreza, sino también una oportunidad para crecer, aprender y colaborar.
El perfil de la emprendedora colombiana
En un país con un entorno empresarial dinámico pero lleno de desafíos, las emprendedoras colombianas han demostrado resiliencia y capacidad de adaptación, lo que ha llevado a una evolución significativa en su forma de operar. En el análisis de los nuevos negocios creados en 2022, destaca el rol de las mujeres en el ecosistema emprendedor. De acuerdo con el informe de Tiendanube, las mujeres lideraron el 62.5% de las nuevas iniciativas empresariales, lo que demuestra un avance importante en la equidad de género en el ámbito empresarial. Esta tendencia no solo refleja un cambio en los roles tradicionales de la mujer en la sociedad, sino también un enfoque renovado hacia la inclusión y la participación activa de las mujeres en la economía del país.
En cuanto a los sectores que más han destacado en el último año, el comercio, la manufactura y los servicios de alojamiento y comida son los que han mostrado un crecimiento significativo, aunque también han surgido otros sectores más innovadores, como el comercio electrónico, las tecnologías de la información y la salud. En este sentido, la capacidad de adaptarse a nuevas demandas del mercado y la flexibilidad para incorporar nuevas tecnologías se ha convertido en un factor clave para la sostenibilidad de los nuevos negocios.
El emprendimiento en Colombia ha pasado de ser una opción forzada ante la falta de empleo a convertirse en una vía de crecimiento personal, económico y social. A medida que la digitalización y las políticas públicas van moldeando el ecosistema emprendedor, las colombianas tienen la oportunidad de transformar sus iniciativas en modelos de negocio sostenibles y competitivos.