A lo largo de 12 años se ha impulsado a más de 33 mil mujeres mediante talleres a crear nuevas políticas en la forma de trabajo
Tener una mayor flexibilidad laboral para que los trabajadores ejerzan de mejor manera su paternidad es la manera en que las mujeres cambian las reglas en el mundo de los negocios.
La cofundadora y directora de operaciones de Victoria147, Ana Cecilia Pérez Cristo, compartió para TV4 Noticias que el gran reto de compaginar el ser mamá y mujer de negocios llevó a la empresa a crear una metodología que fomenta el desarrollo de las personas en pro de la igualdad.
“Si alguno de nuestros colaboradores tanto mujer como hombre tiene un hijo, el tiempo en que se ausenta de la empresa es de cuatro meses y después tiene un proceso de soft landing para que poco a poco retome sus responsabilidades”, explicó.
Destacó que esta política hace que la paternidad y maternidad sea compartida, lo genera una igualdad en las condiciones laborales.
“Impulsamos a las emprendedoras a que tengan ese tipo de actividades y políticas para que cambien la forma en que se están haciendo negocios”, expresó.
Victoria 147 es la primer organización en México especializada en consultoría y programas de emprendimiento para mujeres, y a lo largo de 12 años ha impulsado a más de 33 mil mujeres mediante talleres a crear nuevas políticas en la forma de trabajo.
Para Ana Cecilia Pérez, la flexibilidad no sólo es clave para que las empresas evolucionen, además se debe tener un mejor sistema de contención, de empatía y de desarrollo con los empleados.
En cuanto al dirigir un negocio, comentó que toda mamá necesita redes de apoyo como lo son las amigas, los familiares y la pareja.
“Creer que somos Superwoman se oye padrísimo, pero te rompes en algún momento, por eso impulsamos a las mujeres a crear redes de apoyo y las invitamos a que pregunten qué necesitan para poder operar”.
En Victoria 147, 30% de los emprendimientos femeninos están enfocados en alimentos y bebidas, 12% a moda y el resto en temas de servicios y wellness.
El 36.6% de las MIPyMES son propiedad de una mujer, además contratan a más mujeres para trabajar, aproximadamente dos mujeres remuneradas por cada hombre y el 86.1% del personal que contratan permanece empleado durante todo el año, de acuerdo con el INEGI.
Al implementar políticas que priorizan el bienestar de las personas, las mujeres logran hacer un cambio profundo en la cultura laboral que no sólo mejora la satisfacción de los empleados sino que beneficia a las organizaciones en su conjunto.